ELECTRO QUÍMICO SENSIBILIDAD
Para más información:
Asociación Española Electro Químico Sensibles por el Derecho a la Salud
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#DerechosHumanosParaLosElectroQuímicoSensibles
Qué es
Es la capacidad de sentir directamente el daño de los contaminantes químicos y electromagnéticos. Una respuesta biológica del organismo ante la exposición de tóxicos ambientales a niveles por debajo de los permitidos por ley.
Niveles que además varían en los diferentes países según las decisiones políticas y sin consenso médico especializado real, ni considerando a todos los individuos. Como tampoco aplicando el principio de precaución que cientos de científicos independientes internacionales solicitan.
Nuestro organismo funciona con reacciones químicas e impulsos electromagnéticos. La clave de su buen funcionamiento, y de nuestra salud, consiste en la armonía y balance de estos procesos autoregulables.
Externamente existe lo que beneficia este funcionamiento dando la mayor rentabilidad a nuestro organismo. Y existen las sustancias químicas y electromagnéticas NO biocompatibles que nos restan y consumen dando finalmente lugar a los síntomas y las enfermedades. Incluso a los procesos crónicos y degenerativos o a una muerte prematura NO natural.
La dosis tóxica
La dosis de estos contaminantes hace que nuestro organismo sea más o menos capaz de eliminar estos tóxicos o que se bloquee el proceso de metilación del organismo y empiece a acumularlos en diferentes tejidos. La dosis no es sólo el factor clave sino también la suma de los diferentes tóxicos y las nuevas interacciones que suceden entre ellos dentro de nuestro organismo lo que puede resultar impredecible y aumentar notablemente la toxicidad inicial.
La dosis también es la que hace que tengamos una reacción más directa o lenta de síntomas de salud, de enfermedades o de muerte. Con dosis menores de tóxicos se encubre el efecto más claro y directo pero el envenenamiento celular prosigue su curso con posibles similares consecuencias en un proceso normalmente mucho más lento. Con todo el sufrimiento que ello puede conllevar.
Ante los ataques al organismo de las epidemias químicas y electromagnéticas que estamos viviendo y que siguen creciendo, estamos sumidos en un lento y progresivo envenenamiento de base.
Diferentes tipos de tóxicos y el papel de nuestra genética
Hay diferentes tipos de contaminantes que pueden ser más o menos bioacumulables por su propia naturaleza. La genética individual facilita también este proceso en cuanto a la capacidad de nuestro cuerpo de lidiar con unos u otros tóxicos y cómo poder eliminarlos, o no, de manera natural. Esto puede verse en estudios genéticos determinados.
Enmascaramiento
El problema radica en que estamos inmensos en una sopa química y electromagnética que sigue subiendo y ello hace que se produzca un enmascaramiento dificultando que el propio afectado note directamente qué es lo que le está dañando. Este enmascaramiento produce que la mayor parte de la población no sea consciente de ser electro químico sensible. Como tampoco de la carga tóxica corporal que padece.
Lamentablemente, esta situación, de cada vez mayor intoxicación celular, es un problema masivo.
Con la elección diaria de nuestros hábitos estamos seriamente dañando nuestra salud, y con ello, la de otros seres humanos, animales y vegetales.
Acelerantes
Hay sustancias que aceleran estos procesos como los metales, contaminantes en sí mismos, que además hacen efecto imán de otros contaminantes como los campos electromagnéticos (CEM) artificiales. Esto es, que aumenta el daño potencial
O elementos, como los derivados del grafeno, que además de existir mucha evidencia científica de la preocupante toxicidad de este material, una de sus propiedades es que es un mega conductor, haciendo obviamente más potente el daño de los CEM.
Otro factor que se ha observado asociado a la electro químico sensibilidad, por parte de especialistas en enfermedades ambientales, son determinados virus o bacterias como la bacteria proveniente de garrapata que provoca la enfermedad de lyme o borreliosis. Existen voces de algunos expertos que denuncian que estos virus o bacterias han sido creados en laboratorio. En ese caso, ¿estaríamos hablando de guerras o ataques biológicos?
QUIÉNES LA TIENEN
Realmente todos somos electro químico sensibles pero hay quienes desarrollan una respuesta mucho más sensible y exacerbada por una sobrecarga tóxica y un sistema nervioso y hormonal progresivamente dañado como otros sistemas. Estas personas son ya fisiológicamente hiper sensibles a los contaminantes que lamentablemente siguen in crescendo dañando más y más toda vida. Por ello los expertos internacionales llaman a los Electro Químico Sensibles, los canarios de la mina o los vigilantes de la vida. Porque con su sensibilidad avisan el resto de seres humanos de dónde está lo realmente dañino para todos.
Las Enfermedades Ambientales o Enfermedades de Sensibilización Central son las que encabezan el efecto de la electro químico sensibilidad y con más notoriedad las dos primeras. Estas son:
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- Sensibilidad Química Múltiple (SQM)
- Electrohipersensibilidad (EHS)
- Encefalitis Miálgica o Síndrome de Fatiga Crónica (EM/SFC)
- Fibromialgia (FM)
- Lyme o Borreliosis
Muchos afectados de estas enfermedades acaban teniendo todas estas a la vez, lo que hace imprescindible la aplicación de un CONTROL AMBIENTAL para poder mejorar y estabilizarse y, sobretodo, intentar evitar la creciente sensibilización y empeoramiento.
Hay otras enfermedades que cursan con especial electro químico sensibilidad. Es muy importante constatarlo para poder tomar medidas y frenar la escalada de empeoramiento. Cuanto más tarde se haga, peor pronóstico tendrán.
Recalcar que realmente cualquier persona o ser vivo se puede beneficiar de la reducción de exposición a tóxicos ambientales. En mejora de la energía y funcionamiento del organismo, en prevención de enfermedades o en mejora de sintomatología y pronóstico de salud en general.
SÍNTOMAS
Los sistemas más afectados son el sistema inmunitario, nervioso y hormonal pero, como todo nuestro organismo funciona con reacciones químicas e impulsos electromagnéticos, los efectos de los contaminantes ambientales pueden ser multisistémicos pudiendo afectar a cualquier órgano y funcionamiento del cuerpo.
Esto es que cualquier síntoma podría tener detrás daño celular de contaminantes ambientales.
Aun así son muy frecuentes:
– El cansancio que, con empeoramiento, puede llegar a la extenuación.
– Hiper sensibilidad al sonido o la luz que, con empeoramiento, podría llegar a que sean insoportables.
– Problemas cardíacos
– Migrañas y dolores de cabeza.
– Dolores generalizados musculares y articulares.
– Problemas cognitivos. Dificultad de atención, de concentración, de memoria.
– Ansiedad, depresión, irascibilidad, agresividad.
– Sequedad y dolor ocular.
– Visión borrosa. Empeoramiento de la visión.
– Tinitus
– Las afecciones cutáneas.
– La sequedad, irritación, heridas o sangrados por mucosas (nariz, estómago, intestino, vejiga, uretra, pulmón). Esto, junto con el daño al sistema inmunitario, podría ser una de las causas principales para generar por ejemplo:
– Infecciones y procesos víricos y bacterianos
– Problemas respiratorios
– Tos
– Problemas del aparato digestivo.
– Problemas del aparato urinario.
Es muy importante:
- Aprender a escuchar al cuerpo.
- Tratar las causas y no sólo los síntomas.
- Buscar apoyo de profesionales de la salud que contemplen las causas de los problemas de salud y no sólo traten de frenar los síntomas que sirven de aviso.
CÓMO SABER SI ERES ELECTRO QUÍMICO SENSIBLE
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APARTADO LEGAL – ESTUDIOS CIENTÍFICOS
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CÓMO PREVENIR O MEJORAR
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